Bi Polar

sábado, 25 de noviembre de 2006

Toxicomanía

Cita textual e incompleta:

Ahora se sabe, por ejemplo, que las drogas (cocaína y heroína) activan sustratos moleculares del cerebro que mueven a la persona a buscar la dosis una y otra vez. Y lo mismo ocurre en el individuo enamorado, que sólo cuando está cerca de la persona amada consigue calmar su ansiedad. En este sentido, el enamoramiento sería como una adicción temporal (...)

Puede que otra día sigamos con la cita.

Hay una palabra que, quitándole sus peores connotaciones negativas, me parece contagiosa y es TOXICÓMANO. Tóxico, toxicidad, toxicida, intoxicar, ¿intoxicante?, ¿intoxicador?.

En ciertas épocas uno está deseando convertirse en ese tipo de toxicómano.

La pregunta es: ¿en las otras épocas realmente quiere desintoxicarse?

Coda: ¿O es nunca estamos satisfechos?






lunes, 20 de noviembre de 2006

Una balanza de las antiguas

Vamos a jugar a equilibrios.

Vamos a colocar en la balanza de los deseos dos pesos muy distintos:

a) deseos de cariño y apretones b) deseos de sentirse libre y despejado

Y ahora vamos a jugar a añadir pesitos (¿besitos?) y pesos pesados. A ver quién gana.

(Uno debería estar preparando un examen. Pero esto motiva bastante más. Ha sido el fin de semana en la Alpujarra con un aire de lo más limpio después de las grandes lluvias. Ella le llamaba el desconecte)

En vez de trabajar, estoy con el juego de la balanza.

A quien le gustaba más la parte a), ahora resulta que coloca más pesos pesados en la parte b). Y ese que apostaba por lo de libre y despejado ahora le da por los apretones. Vamos a ver si nos aclaramos. O mejor no.

No se trata de reprimirse sino de controlarse, me acabas de decir.

Ah, claro es el miedo a perder la libertad o a la posibilidad de ganarla, de tenerla también en la mano. ¿Como besar la libertad? A lo mejor esta es la forma de poner en palabras el equilibrio inestable. Decidmelo vosotros.



jueves, 16 de noviembre de 2006

Espejismo o palabra equivocada

Happiness is an imaginary condition, formerly attributed by the living to the dead, now usually attributed by adults to children, and by children to adults.

Thomas Szasz, The Second Sin (1973) "Emotions"

Da igual quién fuera el tal Szasz... Pero creo que esto puede inspirar.

miércoles, 15 de noviembre de 2006

Hay...

.
"Hay noches en que uno debería cambiarse de nombre porque en ellas ya no es el mismo de antes"
Da igual quién lo dijera. El caso es que, en soledad, viene la lucidez. En soledad y en desnudez, me digo (os digo): [Ha salido una carilla de enfadado, ¿no?]:
Es mi cuerpo.
Quiero tratarlo bien.
Es mi mente.
Quiero tratarla bien.
Es mi tiempo.
Quiero ocuparlo con ideas útiles.
Es mi vida.
Quiero que marche lo mejor que pueda.
Yo puedo hacer que mejore mi vida.
Es mi imagen.
Quiero ofrecer lo mejor de mí.
Y quiero darme una buena imagen
y hacer que sea mejor.
No quiero conformarme con el trato que le doy
a mi cuerpo
a mi mente
a mi tiempo
a mi vida.
Quiero estar cada vez mejor.
¿Quiero sufrir?
No.
Y...

En este mundo que adora encontrar culpables / find guilty, podríamos echarle la culpa al invierno. A lo mejor hasta es verdad. ¿La culpa o el agradecimiento?

Seguro que otro lector tiene respuestas más válidas..

Segundas palabras

Es fácil lo del blog, pero ha costado lo suyo editar otra entrada. No sé cómo he llegado a este punto bloguero.

Las segundas palabras sirven para quitarse la máscara o para afianzar la que uno se colocó al principio.

Decido seguir llevando la máscara. Aunque quizá sea mejor abandonar el miedo.

Y digo: toda la vida con propósitos de enmierda y poniéndose fechas para... cambiar. ¡Puaj!

Sigue bajando la luz. Las cinco de la tarde parecen el ocaso. No es buena fecha para reformarse (otra vez).

Si alguien escucha, por favor, que responda.

viernes, 10 de noviembre de 2006

El saludo

El saludo... es lo más difícil... Las primeras palabras... pueden ser cualesquiera...