Bi Polar

lunes, 25 de febrero de 2008

Caudillismo / Leadership


Parecía que la página política iba a atraer más bien poco, pero me alegro de que no sea así.

El caudillismo bipolar es la herencia más inmediata de los 40 años de inmutable jefatura de estado a cargo del salvador de España, el general Franco. Ahora da la impresión de que algunos se creen tan imprescindibles como se creía el tal caudillo por la g. de Dios. Recordemos que tuvimos a un primer ministro 13 años en el poder, que ya está bien. Y, si no lo remedian los votantes (nosotros, creo), en cierta región vamos a tener al mismo durante 22 años.

Vivimos en un sistema político que tiene mucho de republicano. La monarquía es un decorado que queda más o menos bien pasadas las convulsiones de la transición que daban al rey una función de moderador mucho más protagonista que en los últimos años.

Se elige un primer ministro como si fuera el presidente de una república; de hecho, resuena con fuerza eso de 'Presidente' en los partidarios de uno y de otro. Como si esa disyuntiva estuviera por encima de las distintas políticas de los partidos, coaliciones, alianzas; la cosa se centra tan solo en dos perfiles.

Tenemos al uno, que habla, sonríe, giña, gesticula, pero, que, la inmensa mayoría de las veces no dice nada. ¿Qué más da que no diga nada si se supone que lo importante es el carisma, la simpatía? Ni con el talante se resuelve la subida de los precios.

EL UNO (¿Qué ha dicho?)

Poniéndonos un poquito serios, es preferible una persona gris pero eficaz en su labor y clara en su ideología frente a un sonrisas. Puede que, entonces, la política se vuelva más sosa (y lo lamento), pero viviríamos mejor. No creo que el señor Zapatero haya sido el artífice de lo bueno y lo malo que se ha hecho en los últimos cuatro años (tema de la próxima entrada de este blog).

Tenemos al otro, el que carece de gancho, el que, verdaderamente, habla como un registrador de la propiedad ante sus secretarios. ¿Esa seriedad no da confianza? Pues no. Este hombre se ha enfadado en exceso; ha vapuleado de forma terca las propuestas de los otros; ha intentado vivir de la oposición sistemática. El anti no debería funcionar. Y no creo que se recuerden como positivas las acciones como Ministro de Educación del señor Rajoy.


EL OTRO (No lo sabe)

Elegir a los representantes de más de 40 millones de personas no debería consistir en elegir entre un candidato y otro. Parece como si se presentaran estos dos por todas las provincias. Esto ayuda a que haya 348 diputados aparentemente diluidos en los programas electorales, también desconocidos entre los carteles que presentan a uno u a otro careto.

Es curioso cómo ambos dos levantan los brazos, esa forma tan gra-cio-sa de poner los dedos índice y corazón en forma de uve. Ay, los deditos. Y ¿por qué se ríen tanto en sus mítines? Les va bien, supongo.

El sensualista está recalcitrante: me niego a apoyar a uno solamente porque me cae mejor o a decidirme siempre por el mismo. O a tener que quedarme con uno de estos dos.

Pero hay ganas de ver los debates cara a cara para comprobar cómo les han asesorado esos colaboradores sin los que, afortunadamente, no pueden llevarlo to´ p´a´lante. Perdonen la grafía, pero hay que estar cerca del pueblo, ¿no?

Ay, ahora no se dice el pueblo. ¿Cómo era? Ah, sí: "Los Ciudadanos". Qué bien les queda a los dos.

[En los comentarios también podemos hablar sobre los famosos debates. Esperemos que no se trivialicen a lo Tómbola ni se queden en cifras inescrutables a lo debate económico...]


EL UNO, EL OTRO Y EL DEL MÁS ALLÁ (Spot the difference)

7 comentarios:

El Cinéfilo Ignorante dijo...

Aprovecho para agradecer a los autores los comentarios al texto anterior, cosa no fácil pues el tema no es que sea de lo más glamuroso.

He aprendido de la trivialización de serios conflictos transformados en objeto de consumo audiovisual. Y también de la visión exterior de un problema interno... Y celebro conocer opiniones de otros para poder contrastarlas. Gracias, compañeiros.

Bobby dijo...

No hay de qué, Polo, es un placer leerte y participar en este radical "cambio de tercio".
Genial los vídeos, se retratan ellos sólos. Y estoy de acuerdo contigo en todo, pero voy a entrar en una idea: tienes razón con eso de la idea presidencialista de España. Esto no es la democracia madura que nos venden: no sabemos ni quiénes serán nuestros parlamentarios en la Cortes (que es a quien votamos!), ni creo que nos interese mucho.
Acabo de escuchar algo del debate desde la lejana London. Siempre faltan temas asumidos por ambas partes, pues forman parte del tinglado. Temas como: listas abiertas, reforma de la puñetera ley d'Hont que machaca a las minorías dispersas (ej. IU) y beneficia el bipartidismo, duración de mandato de los políticos, etc... He dicho.

Bobby dijo...

Y el urbanismo, y D. Ladrillo? ha acudido al debate de esta noche? (perdón por la reincidencia)

coxis dijo...

si es cierto que no es sano ni el bipartidismo ni que se eternice gente en el cargo, eso es indudable, pero hasta que no cambien la legislación de cómo llevar a cabo las elecciones, el sistema nos obliga a decantarnos por el "voto útil", porque si no yo votaría al partido antitaurino por el senado, pero es que si lo voto finalmente mi voto va a parar a la lista más votada (en Murcia, me temo que el PP) y por ahí no paso...

Anónimo dijo...

Pues un tema que no ha sabido aprovechar Zapatero en contra de Rajoy en el debate, Bobby, ha sido insistir en la Ley del Suelo del PP para culparles de las subidas de precios, de la desaparición de las costas al eliminar la figura de SNU (suelo no urbanizable)... es un tema muy complejo, ya hablaremos de ello. Le habló de la privatización del suelo (concepto erróneo). A veces no se qué tipo de asesores tienen los políticos o si es que no se rodean de especialistas en el tema que analicen todo eso, porque analizando su Ley, la subida de precios de la vivienda, el boom de D. Ladrillo, es fácil echarles en cara la situación actual de las hipotecas, la gente con el agua al cuello, etc... uno de los desencadenantes fue precisamente esa maldita Ley. Y por supuesto, fatal que en una legislatura no haya una nueva Ley del Suelo y ni siquiera haya salido a debate si las competencias urbanísticas deben seguir en manos de los Ayuntamientos, el destrozo de las ciudades, del patrimonio histórico... en fin, siempre preocupa más las cosas que son pan para hoy y hambre para mañana. El destrozo de nuestro patrimonio y costas está llevando a que baje la tasa de turismo en España, principal motor de la economía: ¿por qué no he oído nada al respecto en la campaña? ¿Será por que a los políticos los temas que les interesa siempre son lo que terminan siendo "pan pa hoy y hambre pa mañana"?

Puf, disculpen mi exceso de verborrea, pero estoy calentita con el tema

cris dijo...

Hola polo, me encantaron los 2 artículos, y siento no haber estado tan activa tratandose de un tema que me apasiona, estoy totalmente deacuerdo con todo lo que expones,pero para la vida "virtual", creo que para la vida "real" no es práctico.
Estaría genial lo de las listas abiertas, revisión de la ley electoral para ser un poquito más justo con todos los votantes....pero si reflexionamos eso no vende y como no vende no se trata, en la actualidad los candidatos son el producto y los votantes el mercado, los respectivos directores de mk y comunicacion estudian las necesidades de mercado y como satisfacerlas, y cual producto de jabon nuevo que este lanzando cualquier cía y lo testan en cualquier gran superficie de cualquier ciudad media española"calificada, eso si, con criterio de exigente", van lanzando discursos aqui y alla,insertan comentarios....es decir midiendo hasta ajustar al máximo y jugarsela en un mensaje...por lo que al final estamos en manos de estos gurus.....¿realmente decidimos nosotros o deciden por nosotros?
bueno aun tengo esperanzas llegan soplos nuevos, por ej.ROSA D. creo que todavía es de verdad.
Polo sigue escribiendo que te seguiremos leyendo.

Bobby dijo...

Querido Polo: tu teoría del caudillismo ha surtido efecto (desgraciadamente). Yo estoy contento, que quieres que te diga, con los resultados de las elecciones: aunque tengamos al señorico por sexta legislatura consecutiva en San Telmo.